jueves, 30 de junio de 2011

Waste Land

Lixio Extraordinario



El documental Waste Land de Lucy Walker relata el viaje del artista Vik Muniz a Jardim Gramacho, el mayor basurero del mundo, situado a las afueras de Río de Janeiro. El artista convivió con las personas que tienen en este espacio su modo de vida y junto con ellas creó una serie de obras de arte, que después se vendieron en casas de subastas londinenses.

Conseguir que la basura se convierta en arte

El gigantesco vertedero Jardim Gramacho es, a primera vista, un lugar de pesadilla. Enormes montañas de basura adornan tétricamente el enorme territorio, en el cual miles de personas luchan por sobrevivir día a día recogiendo desperdicios reciclables que puedan cambiar por dinero para subsistir. Pero una vez más, en medio del peor de los infiernos la esperanza surge para demostrarnos que sí, que otro mundo y otra sociedad son posibles. En este caso ha sido el arte contemporáneo el detonante de la “revolución”. El artista Vik Muniz aparece en el documental “Waste Land” (“Lixio Extraordinario” en portugués) durante un periplo de tres años que le lleva desde Brooklin (su lugar habitual de residencia) hasta Río de Janeiro. El objetivo, desarrollar un proyecto personal: conseguir que la basura se convierta en arte, y que, además, sirva para mejorar la vida (y la autoestima) de miles de trabajadores del basurero. En el documental se muestra al recogedor de basura no sólo como una figura marginal que está en una ocupación alternativa, sino como una clase de trabajador con potencial de organización.
Si la parte estética de la película y las imágenes que muestran cómo se hace una obra de arte con basura son excelentes, también lo es la vuelta de tuerca que se le da a la mejora de las condiciones sociales. Los “catadores” (recogedores de basura) se convierten en trabajadores, y no en mendigos o desposeídos. Porque, realmente: ¿no es cierto que es un trabajo digno recuperar lo aparentemente inservible para darle una nueva vida? Precisamente uno de los protagonistas de la cinta es Tiao, un trabajador del vertedero que, en palabras de Muniz, “muestra al recogedor de basura no sólo como una figura marginal que está en una ocupación alternativa, sino como una clase de trabajador con potencial de organización", explica.

Tomado de Talentyart



Gakería de imágenes

sábado, 18 de junio de 2011

Elena Asins Fragmentos de la memoria



"Cultivad la ciencia de los números, porque nuestros crímenes no son más que errores de cálculo". La exposición retrospectiva de Asins, en la que podrán verse obras desde los años sesenta hasta la actualidad, se abre con esta sentencia de Pitágoras.



Las primeras obras de Fragmentos de la memoria se remontan a finales de los años sesenta, cuando se llevan a cabo los primeros seminarios de Generación Automática de Formas Plásticas en el Centro de Cálculo de la Universidad Complutense de Madrid, una experiencia pionera en España de incorporación de las computadoras a los procesos artísticos.

Elena Asins (1940). Artista, escritora y crítica de arte
http://www.blogger.com/img/blank.gif
Fragmentos de la memoria
14 de junio – 31 de octubre de 2011
Museo Reina Sofía. Edificio Sabatini. 3ª Planta
Organización: Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía
Comisario general: Manuel J. Borja-Villel

martes, 14 de junio de 2011

Willi Baumeister

Pinturas y dibujos en el Museu Fundación Juan March (Palma)




La muestra exhibe 50 pinturas y 25 dibujos realizados entre las décadas de 1910 y 1950 y que ofrecen una visión de la creación artística de Willi Baumeister, una de las figuras más relevantes de las vanguardias en Alemania.

La creación artística de Willi Baumeister se desarrolló en grupos de obras temáticamente relacionadas entre sí. Destacan dos ciclos, uno dedicado al pintor y a la modelo y el otro al deporte; ambos temas están muy en consonancia con el espíritu de las vanguardias contemporáneas y con el momento histórico que le tocó vivir, el ambiente y la cultura de la República de Weimar. En efecto, en las décadas de los 20 y 30 el arte “descubre” el mundo del deporte y su cultura. Baumeister, inmerso en la investigación de las posibilidades de representación del cuerpo humano en movimiento, lo incorpora a su universo iconográfico.



Con frecuencia Baumeister representa también su propio atelier, un gesto relacionado sin duda con sus reflexiones sobre la identidad del artista, reflexiones que recogerá en su ensayo Das Unbekannte in der Kunst (“Lo desconocido en el arte”, de 1947), y en otros muchos textos, algunos de los cuales se vierten por primera vez al español en el catálogo de esta muestra.

En la evolución de su trabajo artístico, el lenguaje iconográfico arcaico habría de jugar un papel esencial: sus composiciones con arena de los años 30, inspiradas en las pinturas rupestres de Valltorta (España), muestran una gran fidelidad a la naturaleza al mismo tiempo que un avance hacia la abstracción, con figuras que se convierten en signos y en grafías, reforzando así su carácter simbólico.

A partir de 1933, Baumeister se ve inmerso en polémicas extra-artísticas y, víctima de una campaña de prensa, acaba engrosando la lista de artistas y de arte “degenerado” elaborada por las autoridades nacionalsocialistas. A pesar de ello, Baumeister sigue trabajando e investigando, y su obra, inspirada por la idea de un arte que se adentra en lo desconocido y descubre lo nuevo, acabará por traspasar definitivamente los límites del naturalismo. En 1947, parte de su investigación tomará fo forma en Das Unbekannte in der Kunst, donde, además, se pone de manifiesto la vocación docente del artista, partícipe, en este sentido, de los principios de la Bauhaus.



La exposición WILLI BAUMEISTER (1889-1955). PINTURAS Y DIBUJOS, en el Museu Fundación Juan March hasta el 10 de diciembre.